A cuatro años de la tragedia en la Mina Pasta de Conchos, la concurrencia cada vez es menor de familiares y amigos de los 65 mineros atrapados.

A diferencia de cuatro años, en esta ceremonia luctuosa se pudo observar poca presencia de viudas y familiares cercanos a los 65 mineros muertos en la Mina 8 de Pasta de Conchos.
Puntualmente Monseñor Alonso Garza Treviño, Obispo de la Diócesis de Piedras Negras llevó a cabo la misa para recodar a los caídos en la tragedia registrada el pasado 19 de febrero del 2006, apoyado de diáconos de la Carbonífera, quienes brindaron palabras de aliento a quienes se acercaron con ellos, al sentir todavía el dolor por la ausencia de sus seres queridos.
Aunque se preparo un lugar espacial para realizar la misa a escasos metros del portón de la Mina 8 de Pasta de Conchos, donde también se observa una manta grande, que muestra las fotografías de los 65 mineros muertos en la tragedia, muchas sillas quedaron vacías.
Aunque se cuenta a 65 viudas, al momento de llevarse a cabo la misa, solamente se pudo observar la presencia de Teresa Contreras, Elvira Martinez, Aída Farias, quienes siempre han hecho pronunciamientos para reclamar las labores de rescate para recuperar los restos de sus maridos.
Fácilmente se pudo distinguir la presencia de algunos familiares de los mineros, quienes simplemente bajaban sus rostros, rezando algunas plegarias, observando el panorama actual que guarda la Mina donde quedaron atrapados aquellos quienes fueron hijos, hermanos, padres.
Fueron contadas las familias completas que llegaron a la misa ofrecida por Monseñor Obispo Alonso Garza Treviño, a diferencia de años anteriores, cuando la Mina 8 apenas daba cupo a las miles de personas que llegaban para hacer un reclamo general de esta tragedia minera.
Representantes de Pastoral Laboral, entre otras organizaciones también estuvieron presentes en este 4 aniversario luctuoso de la Mina 8 de Pasta de Conchos, sin embargo, fueron breves los señalamientos vertidos por alguno de ellos.